
El Bayern Múnich y el Auckland City demostraron empíricamente que 900 millones de euros pueden más que cinco. Por si había dudas. Gracias al Mundial de Clubes de la FIFA, experimento social y deportivo sin precedentes, la diferencia de valor entre una plantilla de aficionados y una de profesionales de primera categoría se expresó en el laboratorio de Cincinnati con un 10-0 que los hinchas apostados en las gradas medio llenas, medio vacías, celebraron sin demasiado entusiasmo. El Bayern no precisó salir de su zona de confort para arrasar.
Nuestra fuente:EL PAÍS América Colombia: el periódico global… en EL PAÍS Publicado para Colombia