
Los vecinos de Modelia se quedan absortos ante una docena de velas flameantes en el parque El Golfito. Miran, quedan en silencio, murmuran un par de palabras. Fue acá, el sábado, donde un sicario de 14 años intentó matar al precandidato presidencial Miguel Uribe Turbay. Los habitantes de este barrio bogotano, como todo el país, siguen conmocionados. Leen un folleto de campaña pegado a una roca, rodeado por las velas, con el rostro del joven senador de derechas. “Vuelve la seguridad”, dice. Algunos se persignan y rezan para que Dios lo salve. Otros reflexionan sin pensar en ningún Dios y lamentan el regreso de la violencia política: hace 35 años que Colombia no veía un atentado contra un candidato presidencial. Luego de unos minutos, se retiran y llegan otros que repiten el mismo ritual. Sucede una y otra vez, sin pausa, toda la tarde.
Nuestra fuente:EL PAÍS América Colombia: el periódico global… en EL PAÍS Publicado para Colombia