Rara vez las redes sociales actúan como una verdadera red y cada vez es más infrecuente que cumplan una función de utilidad social. Esta historia es una excepción que habla de México, un país donde una de cada dos mujeres afirma haber sufrido acoso o agresión sexual, pero interpela y cuestiona al mundo entero. Lo sucedido durante la ceremonia de graduación en una escuela preparatoria, que equivale al bachillerato, de Chiapas expuso un patrón de abusos y omertà, el silencio cómplice de los mafiosos, tan universal como normalizado. Una alumna se dirige a sus compañeros y compañeras en el acto de clausura del año escolar en el centro Felipe Carrillo Puerto de Pijijiapan, una población costera del Estado sureño, cerca de la frontera con Guatemala. “Es agotador y realmente triste que les tengan tanto miedo a las palabras y a la verdad”. Su premisa introdujo una denuncia que la semana pasada inundó Instagram y X y desembocó en la detención de un profesor y la dimisión del director.
Nuestra fuente:EL PAÍS Edición Chile: El periódico global en EL PAÍS Publicado para Chile