Cuenta el Génesis que, durante una disputa entre Jacob y su tío Labán, el primero huyó con su familia a las montañas de Transjordania (la actual Jordania). El tío fue en su búsqueda, y se avecinaba un choque violento, pero tras un mensaje divino y un emotivo diálogo llegó la reconciliación, que se selló con los parientes amontonando cantos. Y dijo Labán: “Este majano es testigo hoy entre nosotros dos; por eso fue llamado Galaad”.
Nuestra fuente:EL PAÍS América Colombia: el periódico global… en EL PAÍS Publicado para Colombia