
El Congreso Nacional marca esta semana el tramo final de las asambleas antes de que el sábado 26 de julio se cierre la presente legislatura. Aunque hay varios pendientes, las expectativas giran alrededor de los proyectos de leyes de los códigos Laboral y Penal.
Ambas reformas debieron haber sido aprobadas, al menos, hace más de una década. Sin embargo, las inconformidades de ciertos sectores han dejado al país carente de instrumentos para regular las relaciones laborales, así como de un marco legal que le permita a la justicia castigar a los infractores de las leyes más acorde a la realidad social.
“Esta vez sí hay voluntad política” es la frase más dicha por los legisladores con relación a las normativas. La verdad es que la repiten cada año, pero en este 2025 señalan que sí habrá códigos.
Panorama incierto con el Código Laboral
En el 2022, la propuesta fue llevada al Consejo Económico y Social (CES). Ahí no hubo acuerdo luego de más de 100 reuniones, entre el Ministerio de Trabajo, representantes de los trabajadores y los empresarios.
Entre otros puntos, el empresariado propone cambios en la cesantía, pero ese pedido es rechazado por los gremios sindicales, al indicar que es un derecho adquirido en la reforma de 1992.
En octubre de 2024, el proyecto fue depositado por el Poder Ejecutivo en el Senado, cuyo Pleno designó una comisión, y esta volvió a consultar a los sectores involucrados, pero la discordia siguió. En lo que sí hay consenso es en el teletrabajo, trabajo doméstico, extensión de maternidad, entre otras novedades.
Voluntad política, pero no tiempo
El pasado 10 de julio, el proyecto fue aprobado en primera lectura sin tocar la censatía, lo que provocó que de una vez, comenzara la ráfaga de críticas de los grupos empresariales, provocando que la delegación se reuniera nuevamente con las partes y se acordara adecuar algunos puntos.
La cámara alta debió aprobar la pieza en segunda lectura en las sesiones pasadas; sin embargo, inexplicablemente, los senadores oficialistas y de la oposición votaron para dejar la cesantía sobre la mesa, conociendo que el tiempo está encima.
Pero todavía, en el hipotético caso de que el Senado la valide este lunes o martes, los diputados tendrán que hacer en tres días algo que a los senadores les tomó nueve meses. Es decir, que, aunque haya voluntad política, lo que no habrá es tiempo.
Incluso, aunque el presidente Luis Abinader solicite una legislatura extraordinaria, como advirtió de no aprobarse algunos proyectos, algunos diputados señalan que el tiempo será insuficiente.
El Código Penal, con más posibilidades
El proyecto de ley del Código Penal —que incluye 70 nuevos tipos de delitos y será más drástico con las penas contra quienes cometan crímenes contra las mujeres y personas vulnerables— proyecta tener mejor suerte, ya que como fue depositado en esta legislatura, no caducará.
El Senado lo validó en primera lectura el pasado 10 de julio y, en la sesión de este lunes, el Pleno seguirá votando las demás mociones sometidas a partir de las sugerencias de la Procuraduría.
La proyección es aprobarlo en segunda lectura y que vaya a la Cámara de Diputados para su conocimiento y observación. Al igual que los senadores, los miembros de la cámara baja precisan que sí le darán el visto bueno, ya que el proyecto es reclamado por diferentes actores y sectores de la sociedad.
A diferencia del Laboral, el Penal tiene como ventaja que fue estudiado en una comisión bicameral, por lo que cualquier cambio en la Cámara de Diputados será sin necesidad de enviarlo a una comisión especial.
Nuestra fuente:Política Publicado para República Dominicana