
Que me perdone Marx —no Groucho, sino Karl−, que vengo a enmendarle la plana. Lo de que la historia se repite primero como tragedia y luego como farsa podía tener sentido para el 18 de brumario, pero en el despido de Stephen Colbert y el cierre por parte de CBS de su Late show, emblema de la casa desde 1993, ha ocurrido más bien lo contrario: primero ha venido la farsa y luego la tragedia.
Nuestra fuente:Televisión en EL PAÍS Publicado para Latino America