
Tras más de 58.000 muertos en Gaza desde el comienzo de la guerra, han tenido que perder la vida tres personas en un ataque israelí contra un templo católico en la Franja para que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, reprenda al primer ministro Benjamín Netanyahu. Hay tres consecuencias que sugieren que el bombardeo sobre la parroquia de la Sagrada Familia del jueves no ha sido un ataque cualquiera. Primera, Netanyahu, tras conversar con Trump, ha emitido un comunicado en el que su país se disculpa. Segunda, el mandatario ha hablado también con el papa León XIV, que ha insistido en reclamar un alto el fuego y en pedir protección para los lugares sagrados. Tercera, el primer ministro israelí ha accedido, en una decisión nada habitual por el bloqueo al que está sometido el enclave palestino, a que los jefes de las iglesias católica y ortodoxa lo visiten.
Nuestra fuente:EL PAÍS América Colombia: el periódico global… en EL PAÍS Publicado para Colombia